Help

jakob-lorber.cc

El Gobierno de Dios

[1.13.30] Por esto, ¡Huye! Y llora e implora allí adonde te lleven tus pies. Donde ya no puedas mantenerte de pie, ¡allí quédate, llora, implora y reza, para que no perezcáis, tú y Eva, y todos los demás por culpa tuya!».

[1.13.31] Acto seguido Adán se levantó para marcharse, conforme a la orden del ángel de Dios; pero sus pies estaban como paralizados... Por esto empezó a temblarle todo el cuerpo porque tenía miedo de que le iba a alcanzar el juicio de Dios con el que el ángel del Señor le había amenazado.

[1.13.32] Y de nuevo Adán se echó al suelo, y lloró y clamó en voz alta: «¡Señor, gran Dios todopoderoso! En la gran Gloria de tu Santidad, ¡no cierres del todo el Corazón de tu Amor y tu Misericordia ilimitados, y concédeme tan sólo la fuerza necesaria para que yo ––el más indigno–– pueda huir ante tus juicios conforme a tu santa Voluntad!... Porque todas tus criaturas te están subordinadas –– igual que yo, de pies a cabeza. Señor, ¡atiende mis ruegos!».

Vista escritorio Aviso legal